sabías que...
Paul Poiret revolucionó la moda en el tiempo de La Belle Époque a tal punto que fue llamado "El rey de la moda".
Poiret fue un modisto francés, trabajó en un comienzo con Jacques Doucet y en la casa de modas de Charles Frederick Worth para luego crear su propia casa de moda en 1902.
Fue uno de los pioneros que eliminó dentro de sus creaciones el uso del corsé, ya que encontraba ridícula la forma que este le daba al cuerpo femenino. En 1906 creó un vestido sencillo que recordaba el corte imperio popular en los tiempos de Napoleón Bonaparte, los cuales eran realizados en telas con colores y estampados llamativos, combinados con medias de seda color piel.
Hacia 1910, su estilo fue volviendose más estravagante, subiendo el corte y talle de los vestidos, pronunciando los escotes y estrechando las faldas, además de diseñar la falda de medio paso o tubulares,
con lo cual fue perdiendo adeptas de su casa de modas. Sin embargo, él siguió sumando nuevas inspiraciones orientales a sus creaciones: kimonos, bombachos, túnicas, túnicas pantalla, turbantes, velos, bordados, perlas, plumas, sumando elegancia y lujo.
En 1911 creó una falda pantalón, con lo cual provocó un gran escandalo siendo incluso condenado por el Papa. Otro de los grandes avances de este diseñador, fue el haber lanzado su propio perfume.
Ganó mucha fama hasta antes de la I Guerra Mundial, pues a la llegada de esta fue reclutado, y a su regreso
sus diseños ya no eran del agrado de las mujeres de entreguerra, ellas habían cambiado y por más que Poiret hizo esfuerzos por recuperar clientela, lo único que consiguió fue quedar en la quiebra. Su antiguo reinado ahora recaía en Coco Chanel y su estilo sobrio y cómodo.